Ciento dieciséis chinos y algunos más
Ciento dieciséis chinos y algunos más
Thomas Heams-Ogus
Editorial: Manantial
ISBN: 9789875001510
128 pp.
2012
13 € aprox.
Extraido de: La Ventana Arte y Cultura.
Thomas Heams-Ogus
Editorial: Manantial
ISBN: 9789875001510
128 pp.
2012
13 € aprox.
Extraido de: La Ventana Arte y Cultura.
En 1941 el gobierno de Mussolini decide agrupar e internar en los Abruzos a inmigrantes chinos que vivían en Italia. Son alrededor de ciento dieciséis, quienes no pueden entender las razones de su traslado y encierro.
La vida de ese extraño conjunto se agota, sin objeto ni sustancia. Desarrollan pequeños trabajos agrícolas en los alrededores del pueblo, en medio del aburrimiento, del desarraigo y de la falsa resignación, hasta el día en que, con la caída de Mussolini, todo se pone en movimiento.
Con esta novela, el autor ofrece un metáfora del exilio, de la inmigración y de las amenazas de la intolerancia y de la lucha del hombre para mantener su dignidad.
La vida de ese extraño conjunto se agota, sin objeto ni sustancia. Desarrollan pequeños trabajos agrícolas en los alrededores del pueblo, en medio del aburrimiento, del desarraigo y de la falsa resignación, hasta el día en que, con la caída de Mussolini, todo se pone en movimiento.
Con esta novela, el autor ofrece un metáfora del exilio, de la inmigración y de las amenazas de la intolerancia y de la lucha del hombre para mantener su dignidad.
“El hilo conductor de esta novela es la reconquista del estatuto de hombre.”
La Quinzaine Litterae
--------------
--------------
Todo transcurre entre 1941 y 1943 en los Abruzos. No lejos del Gran Sasso, esa abrumadora montaña que impone su fuerza telúrica como una sombra que recuerda el paso del tiempo. Por una de esas decisiones absurdas y nocivas a las que era afecto el fascismo, allí se confinó a los chinos de la Península Itálica, quienes constituyen una extraña comunidad que se defiende con su mutismo.
Por momentos son ciento dieciséis, por momentos más. La vida se escurre entre los dedos, sin sustancia ni objetivo.
Un día, las autoridades organizan una gran ceremonia, absurda e insensata, para convertirlos al catolicismo. Después, en una mezcla de hastío, desesperación y falsa resignación, retornan a trabajar en los campos hasta el día en que todo tambalea y el grupo se dispersa.
¿Es porque formaban una masa disciplinada y silenciosa, porque venían de otra parte, de un Oriente lejano, que la Historia terminó por olvidarlos?
0 comentarios:
Publicar un comentario